Leticia Rodríguez en un vuelo de entrenamiento.
Leticia
Rodríguez es una mujer con los pies muy bien puestos sobre la tierra. Su trabajo cumple una
función social, trabaja con y para la gente y como ella afirma su cliente principal es la
comunicación humana. Conózcala.
E: Soy Leticia Rodríguez. Soy de Torreón, Coahuila, México, pero también soy mitad texana tengo 25 años viviendo en Texas. Soy intérprete y traductora y aunque nunca pense serlo, hacia allá me llevo la vida y eso es lo que hago ahora y me gusta mucho.
C: ¿Qué interpretas?
E: Bueno, interpreto todas
las circunstancias en donde sea necesario establecer una comunicación entre una
persona que habla español y otra que habla inglés. Y los motivos pueden ser desde el pago de un automóvil
hasta una deportación. Interpreto la vida de los inmigrantes
en Estados Unidos.
C: ¿Nada más inmigrantes?
E: Sí, en la
interpretación trabajo con los hispanoparlantes que no hablan inglés. En la traducción no. La traducción es otro tema, en la interpretación se trata de cosas que les están pasando a las personas en ese momento, por ejemplo que se declaran en bancarrota,
que tuvieron un choque y tienen que arreglar el seguro, cosas de la vida
cotidiana. Las traducciones son lecciones de mil temas. En mi caso, la vida me
llevó al mundo de los helicópteros, trabajé quince años en una compañía
armadora de helicópteros de los cuales ocho estuve en la escuela de
capacitación para pilotos y mecánicos, en donde traducía todos los manuales. Un día
llegaron personas que no sabían inglés, en la escuela no estaban preparados para eso
y era urgente que alguien en el salón tradujera y esa tarea me la asignaron a
mí, y así por esas pequeñas circunstancias o coincidencias en la vida me fui
compenetrando en el tema hasta que llegué a conocer completamente las partes y el
funcionamiento de los helicópteros. Y no solo eso, sino que tuve que encontrar
los términos técnicos de ese mundo tan extraordinario para entender de
qué estaban hablando y poder transmitirlo. Después de quince años
de trabajar en esa compañía me convertí en “Intérprete especialista en
helicópteros”. Actualmente, solamente trabajo para una compañía de helicópteros franceses y
alemanes: Eurocopter, interpretando.
Te diré que casi todos los pilotos de América Latina van un tiempo a la planta
de Forthworth como parte de su entrenamiento.
C: ¿Cómo
podríamos distinguir la diferencia entre interpretar y traducir? Y por otra parte ¿de qué manera tu actuación como traductora e intérprete ha impactó tu vida o la vida de las personas con las que has colaborado. Varias preguntas en una.
E: Sí, es cierto, esas
preguntas me las hago yo también. En primer lugar yo pertenezco a la Asociación de Traductores de América y
allí es donde yo aprendí la distinción entre interpretar y traducir, aunque yo no estoy muy de acuerdo con ella, ya que, para mí las dos
actividades son traducción. Estás traduciendo de un idioma a otro, nada más que
uno es verbal y el otro es escrito: interpretación es verbal, traducción es
escrito.
Mi primera traducción pagada como freelancer fue un folder con textos de una escuela secundaria. A partir
de allí empezaron a llegar otros tipos de traducciones, alguien me pidió luego que
hiciera un folleto, alguien más unas traducciones de reportes de accidentes. Traducía de todo, aunque era poco al inicio pero como todo en mi vida, las cosas se van dando y yo las
tomo y me gusta sentir que puedo cumplir con eso. Entonces yo trabajaba en Bell
y al mismo tiempo hacía traducciones por mi cuenta, lo más sorprendente es que los clientes
llegaban de no sé donde; así llegó la primera, la segunda, con la tercera traducción me pude comprar mi primera computadora (usada); esta traducción era el Contrato de Trabajo del Sindicato de American Airlines en tres
países de Sudamérica porque estaban negociando el contrato en Estados Unidos y
querían saber las prestaciones de las empresas en estos países. Entonces era
llegar del trabajo normal y sentarme a traducir por horas hasta la media noche
para terminar ese contrato, pero ni siquiera sabía cómo cobrar, no sabía cómo era ese negocio, si al facturar se cobraban impuestos o no; llamábamos a algún traductor y nadie nos quería dar información (y estoy
hablando en plural por mi socia). Luego nosotras mismas fuimos poniendo nuestros
propios lineamientos, nuestros propios precios, nuestros propios estándares, de eso hace ya 18 años, los mismos que tenemos en el negocio, y en ese tiempo he disfrutado tanto, tanto, que no puedo creer que además me paguen por hacer lo que me gusta, traducir. Como te digo, cada trabajo ha sido una lección para mí y los campos de acción en los que he trabajado son tan diversos, por ejemplo el de la construcción,
cómo se ponen las vigas, cómo se arma el segundo piso, cómo te puedes colocar
para que no te vayas a caer.
C: ¿Y vas aprendiendo de
cada una…?
E: Si, los jardineros, los carpinteros, los trabajadores de la construcción; muchos son mexicanos y las compañías quieren tener la papelería en español. En eso hemos participado mucho para que ellos puedan transmitir a sus
empleados las precauciones que deben tomar y los sistemas de trabajo que deben
implementar. Otra área en la que trabaja mucho mexicano es la jardinería: cómo hacerle para el arríate, cómo cortar las ramas de los árboles,
cómo podar los arbustos; para mí todas estas son lecciones. En una perforadora
de pozos petroleros, cómo hacen los tubos con ciertos puntos frágiles para que
al explotar la dinamita esos puntos se rompan, eso es otra área que a mí me
fascinó y que trabajamos bastante tiempo con ella pero siempre colateral a
todas las demás cosas. Como yo tengo la licenciatura en nutrición, también nos llegaron
trabajos para hacer folletos en hospitales, los cuales son entregados a las mujeres
embarazadas, o a las que estaban amamantando, o a las que tenían un recién nacido; entonces esa compañía también nos contrató como sus traductoras oficiales para entregar todos esos folletos en varios hospitales de
Estados Unidos.
Durante muchos años
la traducción fue lo único que haciamos, luego vino la oportunidad de hacer una
interpretación, luego otra y otra. La gente por lo general busca en la Asociación de Traductores
personas en el área en la que ellos necesitan ser interpretados y empezaron a llamarnos y a hacer negocio con varias compañías
nacionales.
C: ¿Y cuál es tu prioridad como interprete?
E: Mira lo que yo pienso
cuando estoy interpretando es lo siguiente: Yo como empresa independiente soy mi
propia jefa, claro, está la agencia que me pasa el trabajo, pero en lo esencial yo soy responsable ante mí misma, por lo tanto mi cliente real no es el
enfermo, ni el doctor, ni la agencia, sino la comunicación humana. Entonces trato que esa comunicación sea lo más perfecta posible para que nos entendamos todos.
C: ¿Y se han dado casos de malos entendidos o mala comunicación en los que tú tengas que luchar por
hacerte entender o por entender a tus clientes?
E: Si, normalmente los
malos entendidos pueden aparecer y solucionarse rápidamente, pero en ocasiones las personas no quieren entender, aunque están entendiendo pero no quieren reconocer
que lo están haciendo, entonces allí hay una gran lucha para aclararle a la persona que
está en un error y que lo debe reconocer para que la otra (tercera) persona pueda
hacer lo que tiene que hacer.
C:¿Y por qué no quieren
entender, qué ganan con eso?
E: Como normalmente los que nos llaman para hacer interpretaciones son personas de servicios públicos, ya sea que
dan cupones de alimentos o que ayudan por desempleo o que dan algun otro beneficio a los usuarios, me he dado cuenta que cuando estos servidores públicos no quieren hacer su trabajo es cuando pasa eso. Cuando no quieren dar el servicio, cuando no quieren
atender a la gente y le dicen que se lleve el papel a su casa y que lo traigan
y ellos le dicen es que yo ya lo llené, no, de todos modos llévatelo y
vuélvelo a traer; cosas así, donde uno hace como que no entendió, que ya lo entregó y no hace lo posible por buscar soluciones; entonces en esas circunstancias uno trata de apegarse a la regla de que el intérprete no debe imponer su
opinión ni desviarse de lo que uno le está diciendo al otro; pero si hay ocasiones en que hay que aclararlo y tienes que salirte de tu imparcialidad para decir
mira esto es lo que te está diciendo, yo no tengo problema con eso; y si
alguien considera que no es ético, yo considero que es menos ético y más
confuso seguir con "el teléfono descompuesto".
C: ¿Cuál sería el perfil
de un traductor o un intérprete ideal?
E: Número uno, principal e
indispensable, que te guste lo que haces, con eso ya tienes mucha ventaja. Lo segundo es que
al traducir tengas capacidad de redacción y buena ortografía, mientras que
en la interpretación es indispensable tener amplio vocabulario. Bueno, en los
dos casos se requiere amplio vocabulario y también dominar los
dos idiomas. En la traducción no es necesario dominar el idioma hablado pero
si el escrito; en cambio en la interpretación si es necesario el dominio verbal
del idioma. En el caso de entrevistas con doctores, con abogados, o
en la cárcel, las respuestas
generalmente son cortas, aunque algunas suelen ser más complicadas que otras,
como en una ocasión que en una sesión de terapia psicológica me pasé una hora sentada en el diván con la persona contándole su vida al psicólogo.
C: ¿Tu trabajo ha impactado de alguna manera tu vida personal?
E: Si. Cada vez que cuelgo el
teléfono después de haber hecho una interpretación me siento contenta de haber
ayudado a alguien; de haber podido comunicar lo necesitaba. Me hace ver lo privilegiada
que soy porque en la vida hay tantos problemas todos los días. Me gusta mucho ser una de las pocas personas
que trabajan en el campo de la aviación, sobre todo en el de la interpretación. Yo puedo decir que “soy especialista en helicópteros”, creo que hay poca gente que puede
hacerlo y además ser independiente y estar dispuesta a trabajar en eso.
C: ¿Puedes volar un
helicóptero?
E: Ya en el aire sí pero
las maniobras de despegue y de aterrizaje creo que necesito pulirlas mucho más;
pero sí, teóricamente sé cómo se hace todo ya pasé por todos los
cursos más de cinco veces de casi todos los modelos de Bell Helicopter y de
Eurocopter. En
el aire si puedo volarlo pero me falta afinar muchas cosas.
C: De todos los campos de la actividad humana en
los que has trabajado ¿cuál es el que
más te ha gustado?
E: Mira la literatura me gusta, me
gustaría mucho traducir películas, poner los subtítulos; sin embargo, de lo que hago
ahorita lo que más me gusta son los cursos para mantenimiento y vuelo de
helicópteros, esos son mis favoritos. Las interpretaciones telefónicas que hago en
mi casa me quitan mucho tiempo, a veces son aburridas y además me interrumpen cuando estoy
haciendo la comida u otra cosa, nunca sé si
van a durar un minuto o una hora, pero eso lo siento como mi labor social
dentro de la interpretación y lo hago con gusto.
C: ¿Por qué?
E: Porque no pagan mucho
pero son mi gente y necesitan que los recomiende, y no que siempre les solucione
los problemas que tienen pero al menos les soluciono el problema de la
comunicación.
C: ¿Eres consciente de que hay mucha gente mexicana que requiere ayuda estando en aquel lado?
E: Si, soy conciente de
eso y ese tema a mí me crea muchos problemas, porque generalmente damos mucho más de
lo que recibimos a cambio en un país extranjero. La rabia primera es que en un
país como México no podamos encontrar las facilidades que se encuentran en Estados Unidos. Me
da rabia ver a los hombres jóvenes y sanos que se van para allá y se quedan sin
familia, escondidos viven una vida que no les da más que pobreza. Yo me
siento muy unida a ellos y parte de esas interpretaciones telefónicas que hago es para tratar
de ayudarlos. Yo me siento más mexicana que nada y me siento integrada a
Estados Unidos sólo como
residente porque allá vivo, pero en el corazón, en los sentimientos no cambia nada mi ser mexicana.
C: Pero al principio
cuando dices soy mitad texana…
E: Si, eso de lo texano es
porque tengo un rancho y tengo caballos y porque llevo allá veinticinco
años, porque soy casi vaquera y porque Texas me ha recibido muy bien. La calidad de vida que
tengo ahorita es porque he encontrado una fuente de ingreso que me sostiene, pero estoy convencida que lo que yo doy a cambio es equitativo o tal vez a veces les doy
más de lo que ellos me dan a mí. No sé, pero no siento que me han hecho un
gran favor, a mí la educación me la dio México y ellos la están aprovechando.
Eso es lo que te decía que me da rabia, que vamos a crear riqueza en otro lado
en lugar de crearla aquí por falta de oportunidades.
C: ¿Tú crees en el sueño
americano?
E: Si, hasta cierto punto sí,
aunque recientemente creo que no es tan fácil, pero como para mí fue tan
rápida mi entrada a la fuerza de trabajo, a la economía de Estados Unidos, que
yo siempre pensaba que aquí él que no trabaja es por que no quiere; que el que está
desempleado es porque quiere, pero ahora creo que esto ya no es verdad, que mucho del desempleo se debe a la recesión económica en que está el país.
C: ¿Y para ti en qué consiste el sueño americano?
E: En que tengas un trabajo que te guste, que
te remunere de tal manera que puedas pagar las cosas principales y te quede un
poco para lo demás (ahorrar, pasear y para darte algunos gustos); y tener
una casa cómoda. El sueño americano es alcanzar la seguridad económica y encontrar
el trabajo que te permita sobrevivir. Sin embargo, la vida en Estados
Unidos no es tan cálida como lo es en México; yo me siento dividida porque por un lado me
gusta el sistema de organización de Estados Unidos y me desespera el sistema de
desorganización de México; pero por otro, me desespera el aislamiento y la falta de
relación de calor humano de Estados Unidos y eso me encanta aquí en México, por eso tengo una parte del corazón aquí y otra allá.
C: ¿Te gustaría volver a México algún día y quedarte?
E: Pues estoy haciendo
preparativos y todos en ese sentido, pero todavía me estoy divirtiendo mucho
allá.
C: Al escucharte me da la
impresión que tu trabajo de interpretación y de traducción es como si viajarás mucho, no sé si compartas esta idea.
E: No, más que viajar es
como si estudiara mucho, es como si estudiara arquitectura y luego cocina y luego medicina.
C: ¿De qué manera piensas capitalizar todo ese conocimiento que has adquirido a través de tu trabajo?
E: Pues qué puedo hacer con
ese conocimiento si no solamente ser mejor en lo que hago. Cuando me llega un trabajo ya tengo más o menos una visión general de lo que se necesita, cuando me solicitan una
interpretación siempre pregunto ¿cuál es el tema?, si no lo conozco
pido que me pasen material para leerlo, pero en otros casos, me dicen vamos a
despedir a un empleado, y como ya he estado en despidos de mucha gente ya sé de
qué se trata y no tengo que documentarme. Ese conocimiento me da confianza
y desenvoltura.
C: ¿Has tratado en tu trabajo temas de
muerte?
E: Sí, mira hay accidentes que son sumamente dolorosos y graves de tal manera que mueren o quedan discapacitados, aunque algunos también se recuperan. Una vez estaban
debatiendo si desconectar a una persona para no mantenerla con vida artificial y
más que pedirme que tradujera, me consultaron un aspecto cultural acerca de
cómo podría reaccionar la esposa del enfermo si le planteaban la posibilidad de desconectarlo.
C: ¿Y te han tocado temas
pasionales?
E: Sí, si, un señor se
enamoró de una mujer en Acapulco y él no hablaba español, pero le
escribía cartas en inglés y nosotras se las escribíamos en español, y se iban a
casar, entonces estábamos haciendo los preparativos para la boda, él era un
hombre al que le faltaba un brazo y me gustaba tanto hacer eso que le
cobrabamos una cosa irrisoria, y cuando era el caso, le decíamos, si no
tienes dinero te las hacemos gratis. Y por fin se casaron. También hicimos cartas de
adopción.
C: ¿Nacimientos?
E: Nacimientos, no,
solamente los libros para hospital.
C: ¿Narcotráfico?
E: No.
C: ¿Algún otro tema poco común?
E: Tema poco común, sí, en la cárcel, en la comunicación del preso con los abogados y los argumentos
que pudieran dar y lo difícil que es leer las cartas de una persona analfabeta.
Ese abogado siempre nos ha mandado las cartas de sus clientes que no hablan
inglés y eso es una forma también de ayudar.
C: ¿Temas religiosos?
E: Sí, un tío mío era
pastor (ya murió) y Bush le mando preguntar qué pensaba de la pena de muerte y
mi tío no hablaba inglés aunque vivía en Indio, California, y él pues se
emocionó mucho de que el presidente de los Estados Unidos le pidiera su
opinión, y le hizo una carta inmensa con argumentos bíblicos que se sacó de la manga, porque decía que si él sabía que a Bush le gustaba la pena de
muerte, entonces él lo apoyaba; y yo traduje esa carta con dolor de mi corazón,
pero yo no podía hacer nada, nomás lo ayude a traducirla y mi tío le dijo que
sí estaba de acuerdo con la pena de muerte.
C: ¿Y él no estaba de
acuerdo con la pena de muerte?
E: Si, yo creo que si pues
la Biblia dice “Ojo por ojo, diente por diente”, y eso es legal, se basó en el antiguo testamento más
que en el nuevo.
C: ¿Has trabajado temas
esotéricos?
E: ¿Como por ejemplo…?
C: Por ejemplo tarot, reencarnación…
E: Sí, pero a nivel
personal, no cobraba por eso. La esposa de un vicepresidente de Bell
quería que la esposa del representante de esta compañía en Colombia le leyera el aura, entonces
la señora le dijo – Te veo en la mañana ponte un vestido verde y estén aquí temprano - porque ella era venezolana y la señora gringa, entonces yo interpreté las
cosas que le dijo de lo que ella percibía de su aura. Esa vez estabamos en Canadá, pero la siguiente reunión sería en
Forthworth, entonces hicieron arreglos porque ahora le iba a leer el tarot y
pues ahí estoy yo en el cuarto del hotel para interpretar lo que le dijera sobre el tarot, pero era un
poco difícil porque ella me decía - fíjate que estoy viendo esto pero no le
digas- (risas), porque ella decía que si lo dices se cumple, ya que la palabra
que sale tiende más a cumplirse que la que no sale, entonces yo le decía lo que
ella me permitía y lo que no pues no; pero lo curioso es que salio cierto lo
que le dijo.
C: Y dentro de los trabajos que has hecho ¿trabajaste alguna vez con niños, con recién nacidos?
E: Sí, con libros de recién nacido cómo cuidarlos para que no se asfixien; o de la depresión post-parto, pero casos concretos no. ¡Ah, sí, con la Child Protection Services, la Protección al menor. Hago muchos trabajos porque las mamás que tienen problemas de drogadicción desatienden a sus hijos y el gobierno entrevista al abuelo, a la tía, a la madre provisional para saber a dónde los va a llevar la siguiente persona, entonces voy a las entrevistas y son muy deprimentes, yo cada vez que voy digo “yo me lo quiero llevar a mi casa”. Esos niños con su vocesita y su mirada y ves cuando quieren proteger a su mamá, que dicen que no, que nunca les pegan, que no que nunca los tratan mal… y llega el chiquito y dice: sí, con el cinto me pega mi papá, con la hebilla y el grande dice que no para que los dejen ir con su mamá, aunque sufra todo lo que sufre, sí en esos casos también he trabajado.
C: Si tuvieras la
oportunidad de cambiar de trabajo ¿lo harías?
E: Por gusto no, pero si
me vengo a México mi profesión no sería
fructífera, no se necesita.
Aquí no
hay tanto problema con el inglés, ni tanta necesidad de comunicación entre las personas de
inglés-español; no todo lo que se publica requiere estar en dos idiomas, y
luego, lo que pagan; entonces hay poco trabajo y poca paga, pero sí haría otra
cosa con mucho gusto, de hecho ya lo empecé a hacerlo, empecé a vender equipo
para construcción- pero no sé si
viviría con eso (risas).
C: Bueno, ya hablamos
sobre tu trabajo ¿qué otras actividades definirían tu forma de ser? ¿qué otras cosas haces?
E: Fíjate que yo soy
completamente feliz en mi casa. Soy jardinera, soy carpintera, me gusta mucho
la contemplación de plantas y animales y eso me ha dado para conocer a los
animales, te puedo decir mil historias nomás de lo que estoy traduciendo, luego me canso
y salgo a regar o me siento a observar y con la observación se te vienen todas
las maravillas del mundo, o nada más sentarte a oír cantar al zenzontle en la
última ramita del árbol. Eso, mi casa con todo eso, con los caballos y con mi
trabajo, todo esta ahí, y ya, eso es. Eso soy yo.
C: ¿Hay algo más que
desees de la vida?
E: Lo único que deseo de la vida en este punto es que no llegar a ser una carga, por
eso estoy haciendo todo lo posible por prepararme para ese momento, pero nunca sabes,
alguna vez se puede perder la capacidad de razonar. Eso es mi miedo y por tanto
deseo que no pase.
C: ¿Y tú alguna vez has
escrito poesía?
E: Si, una vez le escribí
una a mi ex esposo.
C: Porque me estaba
acordando ahorita que Dolores Castro dice que la poesía empieza con la
contemplación, que un prerequisito es la contemplación.
E: Una vez escribí en la prepa un poema y la
maestra me lo pidió (risas), creo que se llamaba una octava real, no sé dónde
quedó pero me la sé de memoria todavía.
C: A ver dímela.
E: A ver si es octava
real, 11 sílabas luego 8 versos, bueno dice:
Caminante, tú que estás buscando / la verdadera razón de tu vida / ve siguiendo la senda que andando / marcarán tus pasos, la elegida. / Anda con alegría, ve cantando/ no sientas que vas en loca huída. / Nunca pienses que acabaste, sigue/ no te encierres en ti mismo, vive. / . . .Y quedaban bien las frasecitas... (risas)
C: De alguna manera este poema encierra mucho de tu vida, ¿verdad? de lo que te ha tocado vivir.
E: Si, pues yo creo que
como así pensaba, así era la vida.
C: Bueno ¿hay algo
más que me quieras compartir?
E: Que me da mucho gusto reencontrarte, reconocerte y que te agradezco el
interés por hacer esta entrevista, realmente yo no me siento digna de una entrevista
porque no he hecho nada que sea sobresaliente, ni nada que vaya a dejar huella,
pero bueno…gracias.
C: La gente que como tú hace su
trabajo con gusto y con amor siente eso, que no hace nada extraordinario más allá de lo que
tiene que hacer, pero yo creo sinceramente que tú has tenido un trabajo muy rico en experiencias humanas.
E: Si, eso es cierto, y eso lo
atribuyo a que me dejo llevar por la intuición, por las
circunstancias, y por las oportunidades, que las tomo y no pienso mucho. Yo más que pensar, me enfoco en el sentir, siento, mi vida es así, además alguien que me ha
ayudado mucho en esto es Helen. Yo digo vamos a hacer esto y ella me dice bueno no sabemos pero vamos. Nunca me ha dicho no a nada, absolutamente a nada, y yo siempre quiero hacer cosas, de hecho somos socias y
ella revisa mi trabajo y yo reviso el de ella y hacemos buen equipo. Su apoyo ha sido determinante
para que yo me sienta segura, para seguir aprovechando las
oportunidades y saber que alguien está conmigo.
C: Pues te agradezco
mucho tu tiempo para esta entrevista y espero que tengamos algún día la oportunidad de que nos des un paseo
por helicóptero.
E: ¡Ándale! (risas), pero nomás que no sea yo la
piloto.
C: Muchas gracias, otra
vez.
Leticia Rodriguez (dosamiga@flash.net)